Los colombianos deben prepararse para un aumento en las tarifas de energía eléctrica, que se reflejará en las facturas de mayo o junio de 2024. Este incremento, estimado en unos 35 pesos adicionales por kilovatio hora, representa un alza entre el 5 y 6% en la tarifa habitual1.

La situación surge como consecuencia del fenómeno de El Niño, que ha llevado al Ministerio de Minas y Energía y a la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg) a emitir dos regulaciones. La primera, una resolución del Ministerio que obliga a las termoeléctricas a generar energía a su máxima capacidad. La segunda, una resolución de la Creg que instruye a las hidroeléctricas con reservas de agua para más de 20 días a utilizarla para producir electricidad2.

Estas medidas han causado una caída drástica en el precio de la energía en bolsa, pero también han incrementado las restricciones, un componente de la tarifa de energía, que ahora cuestan a los colombianos casi 40.000 millones de pesos al día3.

El ministro de Minas y Energía, Andrés Camacho, atribuye el incremento a las ofertas de agentes del mercado durante El Niño y ha solicitado una revisión del tema por parte de las superintendencias pertinentes4.

Este aumento en la factura de energía será asumido por todos los usuarios en Colombia, reflejando el sobrecosto que las restricciones representan en la tarifa mensual5. Anteriormente, las restricciones influían entre un 2 y 3 por ciento en la tarifa, pero tras las decisiones regulatorias, su impacto se elevará al 5 y 6 por ciento6.

El país enfrenta un desafío energético que requiere la atención y comprensión de todos los ciudadanos, mientras las autoridades trabajan para mitigar el impacto económico de estos cambios tarifarios.