El ahorro de los hogares colombianos ha mostrado una tendencia positiva en los últimos trimestres, impulsado por una combinación de factores como el aumento del ingreso disponible, una baja en las tasas de interés y la desaceleración del gasto. Aunque el ahorro se recupera desde los niveles mínimos alcanzados en 2022, aún no supera el promedio previo a la pandemia. Actualmente, el ahorro representa aproximadamente el 4% del PIB, un porcentaje que, aunque cercano al crecimiento general de la economía, sigue siendo inferior al de los últimos 15 años.
Dinámicas de consumo: prioridades en tiempos de cambio
Según datos del DANE, el gasto de los hogares en bienes de consumo básico como alimentos, vivienda y salud ha sido constante, mientras que los bienes duraderos como automóviles y electrodomésticos muestran variaciones debido a la inestabilidad en los ingresos. Durante la pandemia, el gasto en bienes duraderos cayó un 31.45% pero se recuperó en 2021, mientras que el gasto en alimentos apenas descendió un 1.25% en el segundo trimestre de 2020, recuperándose rápidamente.
Destino de los ahorros
Una parte significativa del ahorro de los hogares se destina a la adquisición de vivienda, cuya demanda creció un 13.4% en el segundo trimestre de este año. El 80% de los recursos de inversión doméstica se destina a inmuebles y bienes de equipo, aunque la inversión en maquinaria cayó un 17% en 2024, afectando los niveles de pre-pandemia.
Desafíos y oportunidades
La Asociación Nacional de Instituciones Financieras (ANIF) advierte que aunque el ahorro ha mejorado, aún no se han alcanzado los niveles necesarios para impulsar un crecimiento económico sostenible. Los analistas subrayan que aumentar el ahorro e inversión de los hogares será clave para fortalecer las bases del desarrollo a largo plazo en Colombia.
Para más detalles sobre la economía colombiana, visite el Banco de la República y ANIF.